Tengo que confesarte algo, que me aliviará mucho: yo era una persona que criticaba mucho… Sí, lo hacía. Destripaba a la gente hasta que no quedaba ni los huesos… Esa es la imagen descriptiva de la crítica. Te parecerá muy duro, pero eso es lo que hacemos cuando criticamos.
Recuerdo cuando era pequeña, me pasaba la vida que si fulanito hace tal, que si mira menganito lo que hace… Era un no parar.
Criticar no le gusta al Universo
Seguramente hayas escuchado hablar sobre la Ley de la Vibración y de la Causa-Efecto, de las 12 leyes universales espirituales. Estas leyes te quieren venir a decir que si quieres amor, tienes que dar amor. Si estás buscando tu meta con una frecuencia de vibración, ¿tú crees que criticando vas a encontrar lo que buscas? Efectivamente, tú mismo lo has dicho: NO. Esta es la primera señal para que dejes de criticar.
Tenemos que tener una vida mental saludable enfocada en nuestras metas y en nuestro bienestar y así es como el universo nos recompensará gustosamente. De esta forma actúa la Ley de la Causa-Efecto. Si nos pasamos el día juzgando y viviendo la vida de quien no nos corresponde, el efecto en nuestra vida no será el mismo porque habremos perdido el tiempo juzgando a los demás. Ahí es donde surgen las lamentaciones y eso no lo queremos ¿verdad?
Nosotros tenemos la capacidad de crear nuestra propia realidad y si nos pasamos juzgando la vida de los demás, estaremos perdiendo nuestro tiempo, porque nuestra realidad será escasa, vacía, sin ningún tipo de compromiso. Es por eso que decidí prometer delante de un público de 500 personas en un seminario al que acudí sobre desarrollo personal, que no iba a criticar más. Ahora te toca a ti ¿te comprometes conmigo? Es la llave mágica a la liberación personal…
Juzgar a los demás dice mucho de ti
Te voy a contar una pequeña historia que es ahora cuando la he comprendido en mi camino del desarrollo personal, para que la puedas entender e integrar mejor.
Cuando era pequeña, mi madre tenía una amiga a la que le gustaban mucho los temas de espiritualidad. Un día, yo estaba muy enfadada con mis compañeros del instituto y se lo conté a ella y enuncié una serie de juicios hacia ellos. Ella escuchaba atenta a lo que yo le comentaba pero cuando criticaba a mis compañeros, siempre me contestaba lo mismo:
“Eres el espejo de lo que juzgas”
Yo no entendía qué era lo que quería decir. Yo siempre decía: “O sea, que si fulanito es idiota, yo también… Pues no, fulanito es idiota y punto”.
Al cabo de los años, siempre me cruzaba con esa frase pero no la terminaba de entender, hasta que hice un curso de astrología y lo entendí del todo. Lo que criticas a una persona corresponde a algo de tu vida que te molesta. Para que te hagas una idea: yo tenía en el trabajo un compañero que consideraba bastante desastroso, no me gustaba nada su forma de vivir, siempre llegaba tarde, desaliñado, hacía cosas que yo nunca haría y su presencia me ponía nerviosa. Descubrí que él me recordaba mi parte inflexible que me hacía daño, mi parte estricta que dictaba cómo tenían que ser las cosas y eso me ayudó a trabajar para sentirme mejor conmigo misma.
Huye de las personas que se pasan la vida criticando
Para que tu vida sea más abundante procura estar con personas que cuenten cosas interesantes, que te enriquezcan el alma y que tengan cosas de valor que aportar. Las críticas bajan el nivel de vibración y como te he dicho antes, llegará un momento que pensarás que has perdido el tiempo tratando cosas que no te ayudan a crecer como persona.
Si hay algo que de verdad te molesta de una persona, trátalo con ella directamente y así te sentirás más aliviado. Seguramente que de esa conversación, surgirán cosas que te darán una pista para seguir creciendo.
Es mejor crear algo y ser criticado por todos que no crear nada y vivir criticando a los demás.
– Steve Jobs
La flor que te ayuda a transformar la crítica en amor
Acebo o Holly es la esencia adecuada para que, como yo, te prometas a ti mismo que vas a dejar de criticar. Tomándola te ayudará a reconocer tus sentimientos hacia la otra persona con amor, para poder integrar aquello que tu alma necesita para poder avanzar y desarrollarse.
Para tomar Holly, deberás de utilizar dos gotas en un gotero, esterilizado, de 30 ml y rellenarlo con agua mineral y tomar 4 gotas durante 4 veces al día. Te recomiendo además que observes los cambios e incluso los anotes en una libreta. Yo tengo la mía personal donde apunto lo que siento cuando estoy tomando un preparado de flores para un momento determinado. Así te darás cuenta de los cambios que te han ido surgiendo y cómo estás evolucionando como persona.
Abriéndote y reconociendo aquello que quieres trabajar en tu persona, el Universo te lo devolverá al haber sintonizado la frecuencia y la vibración del amor y la empatía con los demás y sobre todo contigo mismo.
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